Avoid freezing through fashion.

Combatiendo el frío:

El arribo del mes de diciembre conlleva una cantidad considerable de cambios: el invierno, las festividades, las vacaciones,… pero inevitablemente todos los habitantes del hemisferio norte asocia esta mensualidad con la bajada de las temperaturas e incluso en muchos casos, con la nieve. 

Courtesy of Pinterest.

No obstante, la demora que se está produciendo de forma excepcional este año en la bajada de las temperaturas, nos hace replantearnos si realmente el frío al que estamos acostumbrados terminará por llegar. En efecto, el clima a estas alturas del otoño no se puede definir como cálido, aunque tampoco se iguala al gélido tiempo que nos ha ocupado con anterioridad. Probablemente, si preguntásemos a una variada selección de personas a cerca de que motivo consideran culpable de esta peculiar situación, la respuesta unánime que se nos daría señalaría al cambio climático. 

Parece ser un tema que nos persigue incansablemente a través de los medios de comunicación, la plataformas sociales, los temas de conversación mundanos y cualquier otra vía informativa, pero nunca se había sentido su presencia de un modo tan palpable hasta que sus repercusiones han empezado a alcanzar indiscriminadamente a toda la población. No es algo desconocido a nadie el que como seres egocéntricos no somos capaces de tomar consciencia de un peligro hasta que nos sentimos directamente amenazados por este, escribo estas palabras sin ánimo de reproche, sino con el fin de contextualizar el momento que nos acontece. 

Courtesy of Pinterest.

Llevamos años siendo advertidos respecto a las consecuencias de la deforestación, el incremento de las temperaturas a nivel global, la contaminación y los materiales utilizados en la fabricación de los productos de consumo diario, pero no ha sido hasta que estas mismas nos han alcanzado al estamento de privilegios medios que la mayoría empezamos a verdaderamente experimentar el mismo estado de alarma que el resto de nuestros congéneres más desfavorecidos cuya calidad de vida viene viéndose afectada por estas hace demasiado. 

Por todas las causas enumeradas, y muchas otras que no se incluyen en este listado, es que la moda sostenible es una responsabilidad que ya no solo deben cumplir las marcas, sino también los consumidores. 

Courtesy of Pinterest.

A pesar de que el frío todavía no haya echo su entrada estelar, si que es cierto que las prendas de abrigo han salido de su periodo de letargo veraniego, haciéndolo además con una buena ración de estilo. Las tendencias que dominaron las pasarelas en su momento, mas tarde las redes sociales y por fin las calles son algunas de las más codiciadas esta temporada y es que si bien la tristeza estacional es una dura realidad para muchos, la ropa es un elemento capaz de arrancar sonrisas. 

Courtesy of Pinterest.

Todos hemos fantaseado alguna vez con poder llevar nuestra cama a cuestas con nosotros allá donde vayamos, preferiblemente sin la necesidad de salir de ella, un deseo que gracias a los abrigos acolchados estamos un paso más cerca de cumplir. Calentitos, modernos y cómodos, no se le puede pedir mucho más a estas piezas de vestir. 

Courtesy of Pinterest.

Por otro lado, este mismo estilo puede verse en distintas siluetas que están arrasando actualmente, entre otras están los maxi abrigos, los cuales (al igual que los vestidos y faldas con el mismo nombre) prácticamente tocan el suelo con su longitud kilométrico; o también las bombers propias de los años ochenta que han retornado con más vigor que nunca tanto para la estética motera como para la colegiala. 

Courtesy of Pinterest.
Maxi abrigo

Courtesy of Pinterest.
Bomber

Como era de esperar tras todo un verano ocupando el podio de las ventas en todo el mundo, el cuero continúa siendo un artículo indispensable para todos los entusiastas de la moda. En este caso, afirman con su ejemplo los grandes iconos de la industria, la opción más chices el formato tipo gabardina, ya que este conjunto abarca desde el refinamiento francés hasta el futurismo de “Matrix”. 

Courtesy of Pinterest.

¿Otro tejido a tener en cuenta? El pelo. Hoy en día son cada vez más mujeres las que no se sienten atadas al estándar de belleza de la depilación, y que por tanto optan por lucir sus piernas y/o axilas en su estado más “vello”. Pero no es este precisamente al tipo de pelo al que aquí hago mención, al igual que tampoco lo es el de las preciosas extensiones de artistas como Rosalía o Dua Lipa. 

Se trata del pelaje que si bien ahora se consigue mediante métodos artificiales y más respetuosos con la flora y fauna del planeta, lleva acompañando al ser humano desde sus inicios prehistóricos, por lo cual se podría decir que los primeros Homo sapiens sapiens ya marcaban tendencia. Un dato peculiar sobre esta tendencia en particular es que son precisamente los abrigo estilo bata (en efecto, con cinturón y todo, como las de los hoteles) los que se auguran como autoritarios durante los próximos meses. 

Courtesy of Pinterest.
Rihanna

Por último, esto no podría ni remotamente clasificarse como una entrada dedicada a los abrigos más destacados de la entrante temporada invernal sin una digna mención de honor al borrego. En chaquetas moteras, en los cuellos o escotes, como protagonista único,… no importa la presentación mientras esté visible porque su sola presencia es capaz de elevar cualquier atuendo (al menos por ahora). 

Courtesy of Pinterest.

Y ahora sí, puedo cerrar este texto en definitiva con un mensaje final: la forma más eficaz para empezar a cultivar hábitos que apoyen la economía circular es disminuir el consumo y asumir que cuantas más veces nos pongamos una prenda más incrementa su valor pues se vuelve atemporal; o en palabras del genio francés, Yves Saint Laurent “las tendencias pasan de moda, pero el estilo no.”

Courtesy of Pinterest.

À bientôt, 
Le Chaos.

 

————————————————————————————————

Battling the cold:

The arrival of the month of December entails a considerable amount of changes: winter, festivities, vacations,... but inevitably all the inhabitants of the northern hemisphere associate this month with the drop in temperatures and even in many cases, with snow. 

Courtesy of Pinterest.

However, the delay that is taking place exceptionally this year in said decrease makes us rethink whether the cold to which we are used to will really end up arriving. Indeed, the weather at this autumnal point cannot be defined as warm, although it is not quite like the icy weather that has occupied us previously. Probably, if we asked a varied selection of people about what they consider to be the cause of this peculiar situation, the unanimous answer that we would receive would point to climate change. 

It seems to be a subject that relentlessly haunts us through the media, social platforms, mundane conversations and every other informational venue, but its presence has never been felt so palpably until its repercussions have begun to spread and reach indiscriminately the entire population. It is not something unknown to anyone that as egocentric beings we are not capable of becoming aware of a danger until we feel directly threatened by it. I write these words without reproach, but in order to contextualize the moment happening before us. 

Courtesy of Pinterest.

We have spent years being warned about the consequences of deforestation, the increase in global temperatures, pollution and the materials used in the manufacture of daily consumption products, but it has not been until these have affected the middle class privileges, that most of us are truly beginning to experience the same state of alarm as the rest of our most disadvantaged fellow human beings whose quality of life has been touched by them since long before. 

For all the reasons listed, and many others that are not included in here, sustainable fashion is a responsibility that not only brands must comply with, but also consumers. 

Courtesy of Pinterest.

Despite the fact that the cold has not yet made its stellar entrance, it is true that outerwear has come out of its period of summer lethargy, also doing so with a good portion of style. The trends that dominated the catwalks at months ago, later the social networks and finally the streets, are some of the most coveted this season because although seasonal sadness is a harsh reality for many, clothing is an element capable of breaking smiles. 

Courtesy of Pinterest.

We have all fantasized about being able to take our bed with us wherever we go, preferably without having to get out of it, a wish that thanks to padded coats we are one step closer to fulfilling. Warm, modern and comfortable, you can't ask for much more from these pieces of clothing. 

Courtesy of Pinterest.

On the other hand, this same style can be seen in different silhouettes that are currently sweeping, among others are the maxi coats, which (like the dresses and skirts with the same name) practically touch the ground with their kilometric length; or also bombers have come back from the eighties to the future as lively as ever for both the biker and preppy aesthetics. 

Courtesy of Pinterest.
Maxi coat

Courtesy of Pinterest.
Bomber

Unsurprisingly, after a summer at the top of sales worldwide, leather continues to be a must-have for all fashion enthusiasts. In this case, the great icons of the industry affirm with their example that the most chic option is the trench coat-type format, since it ranges from French refinement to ”Matrix” futurism. 

Courtesy of Pinterest.
Zoe Kravitz 

Another fabric to consider? Hair. Nowadays, more and more women no longer feel tied to the beauty standard of hair removal, and therefore choose to show off their legs and/or armpits in their most "hairy" state. But this is not precisely the type of hair that I am mentioning here, just as it is not the one of the precious extensions of artists like Rosalía or Dua Lipa. 

It is about the one that, although it is now achieved through artificial methods and more respectful of the flora and fauna of the planet, has been accompanying the human being since its prehistoric beginnings, for which it could be said that the first Homo sapiens sapiens were already trend setters. A peculiar fact about fur is that it is precisely the robe-style coats (indeed, with a belt included, just like the ones from hotels) that are predicted to be authoritarian in the coming months. 

Courtesy of Pinterest.

Finally, this could not even remotely be classified as an entry dedicated to the most outstanding coats of the upcoming winter season without a worthy mention of honor to the shearling. On biker jackets, on the collars or necklines, as the sole protagonist,... no form of presentation matters as long as it's visible because its mere presence is capable of elevating any outfit (at least for now). 

Courtesy of Pinterest.

And now, I can finally close this text with a final message: the most effective way to start cultivating habits that support the circular economy is to reduce consumption and assume that the more times we wear a garment, the more its value increases, since it becomes timeless; or in the very same words of the French genius, Yves Saint Laurent, "trends go out of style, but style never does."

Courtesy of Pinterest.

À bientôt,
Le Chaos.